A la hora de mejorar el CRO o ratio de conversión, una de las acciones que se suele llevar a cabo un consultor SEO, es la realización de uno o varios test A/B, unos test que se hacen después de recabar datos sobre la web.
Con esos datos establecemos unas hipótesis, como por ejemplo que si cambiamos los anuncios de sitio lograremos más conversiones, de manera que “creamos” dos versiones de nuestra web, una con los anuncios como estaban y otra con los anuncios siguiendo nuestra hipótesis.
Esto hace que podamos medir los resultados y ver si nuestra hipótesis era válida, es decir, si así se mejora la conversión, por lo que los test A/B son muy útiles, siempre que los realicemos como es debido.
No todo el mundo sabe realizar estos test, con los cuales se suelen cometer muchos errores que hacen que al final las pruebas no sirvan para nada. Por eso, vamos a ver algunos errores comunes en estos test, para que tú no los cometas cuando realices tus pruebas.
Usar demasiadas variables en los test
Este es quizá el error más común, pues queremos probar nuestras hipótesis a la vez, lo que al final hace que no obtengamos datos válidos.
Si seguimos el ejemplo de antes, el de los anuncios, podemos cambiar los anuncios de lugar (a la vez si podemos identificar los clics de cada uno de los anuncios), pero no podemos cambiar a la vez el formulario para obtener emails y cambiar las fuentes de los anuncios, pues al final los resultados obtenidos no sirven de nada debido a las múltiples variables que hemos introducido.
De esta manera, para que nuestro test sea válido, lo que hay que hacer es cambiar una variable cada vez, de manera que los datos que hemos obtenido sean claros y nos sirvan para mejorar el CRO, que es la finalidad de estos test.
No parar de hacer test A/B
He de reconocer que este tipo de test engancha, sobre todo cuando empiezas con ellos y mejoras el CRO. En ese momento piensas que si uno o dos test han mejorado tu ratio de conversión, diez test lo mejorarán aún más, de manera que te lanzas a realizar test A/B de manera constante.
Esto no vale para nada, pues al final lo que haces es cambiar la web de manera constante, sin parar y en muchas ocasiones centrándote en minucias, como el tono de color de un botón que no sirve para nada.
No es raro que cuando se hacen estos test tan seguidos y los cambios no paran se consiga el efecto contrario, lo que te lleva de nuevo a hacer más test para mejorar el CRO de nuevo, entrando en una especie de vorágine que puede terminar muy mal, con muchas menos ganancias que las que tenías al inicio.
Por eso, lo mejor es que hagas estos test con calma, poco a poco y pensando muy bien en las hipótesis de partida.
Usar varios tipos de tráfico
Mandar varios tipos de tráfico es otro de los errores que la gente comete cuando hace los test. En muchos de ellos, se manda tráfico pagado (SEM), tráfico procedente del email marketing, tráfico de las redes sociales, etc.
Esto sucede sobre todo a la hora de testear una landing page o página de aterrizaje, la primera página que ven las personas que entran en nuestra web, destinada a un fin muy concreto, como puede ser la venta de un ebook, captar suscripciones, vender un curso, etc.
El error tiene mucho que ver con el primero que hemos visto, el de medir varias variables, pues en este caso, el test no va a resultar, pues te va a ser imposible obtener un resultado válido.
Si seguimos el ejemplo de la landing y le mandas tráfico de cuatro sitios distintos, no vas a poder saber qué tipo de landing convierte mejor para cada tipo de tráfico.